sábado, 8 de mayo de 2021

EDGARD, EL COLECCIONISTA - EL ÚLTIMO PACTO (HISTORIAS DEL CUADERNO NEGRO)

EDGARD, EL COLECCIONISTA EL ÚLTIMO PACTO (HISTORIAS DEL CUADERNO NEGRO) Nos llamó la atención, a la hora de la cena la ausencia de mi fiel mastín, Cerbero, por lo que lo buscamos y llamamos sin resultado. Aurora descubrió dónde se hallaba. Clavado sobre una cruz invertida de madera, enterrada en mi jardín, estaba mi pobre compañero de tantos años. Lo habían degollado, luego de rajarle el vientre, de cuya rotura pendían sus intestinos. Estábamos impactados más allá del espanto. Amaba a mi perro. Tristán, mi ayudante, tuvo la entereza de acercarse para despegar la nota fijada en la parte superior de la cruz. Era una carta de mi funesto medio hermano. ´´Pequeño hermanito: estoy seguro que este hallazgo te ha sorprendido de verdad. Te sientes tan poderoso y seguro, que no has verificado la piedra que te anuncia mi cercanía por su cambio de color. ´´Crees que porque te encuentras con Aurora y Tristán, están a salvo, con la garantía de sus poderes unidos. Ya ves que no es así: podrías ser tú mismo quien yaciera ahora pendiendo de una cruz. ´´Te voy a proponer, un último gesto de buena voluntad hacia ti. (Después de todo, compartimos la sangre de nuestro padre). ´´Piensa en esta posibilidad: unamos nuestros dones, y el mundo, tal y como lo conoces, cambiará absolutamente. Seremos amos y señores de un universo nuevo, diferente. ´´Sácate de encima ese dilema de ponderar el bien y el mal. Si existen, es porque son necesarios en el equilibrio cósmico, y lo nivelan. Que pases de uno a otro no causa ningún inconveniente, ya que ambos sirven al mismo propósito. ´´Si accedes, ambos tendremos descendencia con Aurora. Nuestros hijos serán indestructibles, y Tristán procreará con selectas aliadas mías, dotadas del don, y será nuestro primer ministro en el nuevo reinado, junto a mi madre, y otro aliado, cuya identidad me reservo, por ahora. ´´Capitanearías un ejército de almas desencarnadas, que obrarían esclavas de tu voluntad. ´´Si estás de acuerdo con el pacto, lo sellarás prendiendo fuego la cruz con tu perro. Yo sabré captar en la energía de las llamas la veracidad de tus intenciones. ´´Si desistes de aliarte conmigo, te espera una muerte lenta y dolorosa. ´´Tu amigo Tristán será un títere torturado, para usar a mi gusto sus poderes, y tu bella Aurora, lo quiera o no, traerá al mundo a mis herederos, como esclava personal para usurpar su don a mi favor. ´´Esta es mi última muestra amigable de conciliación. Se me acaba el tiempo y la paciencia. Si no accedes, te arrepentirás amargamente. No cambiarás el curso de la nueva era que se avecina. ´´Espero la señal a medianoche. Tristán y Aurora me abrazaron. Me caían lágrimas de tristeza y odio, lo cual me desagradaba profundamente: el odio es un sentimiento indigno, bajo. Le quité a Cerbero su collar, que relumbró con la energía del amor y la lealtad que me tuvo siempre. Pasaría a mi colección como símbolo de la fidelidad incondicional y nobleza de los animales, brillando incandescente. Luego, los tres hicimos una ronda alrededor de Cerbero en su cruz, con las manos unidas, y oramos al unísono con una potencia emocional que hizo vibrar la tierra. La nefasta cruz invertida se empezó a hundir, para darle acogida al entierro de mi perro, y una vez que desapareció de nuestra vista, elevamos la frecuencia, orientando el penar y repudio hacia mi medio hermano Velasco. Un grito que solo nosotros oímos en nuestra mente, de desgarrada furia y dolor extremo, sonó de forma estremecedora. Nuestra letanía lo estaba torturando intensamente, como él había mortificado a mi pobre perro. De pronto, cayó un rayo del cielo preñado de nubes deformes sobre la tumba de Cerbero, y al caer las primeras gotas de lluvia, súbitas y violentas, deshicimos nuestra ronda, y entramos a la casa. Ya solo nos queda esperar el encuentro que definirá mi fin o mi salvación. No habrá más provocaciones. Será una lucha donde alguien saldrá sin vida. Los espero en La Morgue, próximo escenario de un duelo mortal.